miércoles, 29 de junio de 2011

4. La Graduacion



-Melanie apúrate, ya tienes que bajar-me dijo Valerie en la puerta.

-¿Para que?-le pregunte confundida ya que hace un momento habia estado con Yasir, besandonos y diciendonos lo mucho que nos amabamos y eso me hacia olvidar todo.

-¿Cómo que para que?-dijo exasperada-las monjitas nos mandaron a reunir a todas para decirnos todo acerca de nuestra graduacion, que por cierto es mañana por si no te acuerdas-dijo con la voz incredula porque eso lo habian dicho toda la semana y yo me habia estado preparando para eso, cuando llego Yasir y me hizo olvidar todo.

-Oh si, claro, se me habia olvidado-le dije.

-Si ya me doy cuenta, es que no se en donde ha estado tu cabeza estos ultimos dias-dijo y yo en mi interior me reia, si supiera donde estaba creo que perderia su amistad y llegamos al salon donde ya estaban todas reunidas.

-Sientense por favor niñas, ya va a comenzar la reunion-dijo la hermana Catalina.

-Claro a ellas las dejan hacer todo, sobre todo a Melanie pero si fuera una de nosotras las que llegaramos tarde seguro nos hubieran regañado-dijo Lucia, una compañera con la que Valerie ni yo nos habiamos llevado bien nunca, siempre hablaba mal de nosotras, sobre todo de mi, Valerie decia que eso era envidia y por ende iria al infierno ya que eso era unos de los pecados capitales, yo le daba la razon pero ya no podia decir lo mismo, no por lo menos criticarla porque estoy segura de que yo estaba cometiendo uno peor.

-Orden señoritas-dijo la madre superior.

-Porfavor niñas atencion, la madre superiora va a empezar con la reunion-dijo una de las hermanas.

-Bien señoritas, la razon de esta reunion es su graduacion, ya lo saben, bien la graduacion sera en el pueblo en el centro de actividades de la iglesia y comenzara a las diez de la mañana, asi que hay que llegar no mas tarde de las nueve y media y tienen que estar listas a las ocho o a mas tardar a las ocho y media y con el uniforme de ocaciones especiales y al llegar les entregare sus togas y eso es todo, gracias y pueden volver a sus respectivas actividades o mejor a preparar las cosas para mañana, manos a la obra señoritas y con Dios delante-dijo y se retiro. Valerie y yo nos levantamos y nos dirijimos a nuestra habitacion.

-Esto no es justo, todas las chicas del pueblo tienen una graduacion y llevan puestos trajes y por la noche tienen fiestas y van con trajes de gala y mira nosotras con un uniforme, un uniforme de monjas-dijo Valerie enojada y haciendo un berrinche.

-Trankilizate Vale, con ponerte asi no vas a poder cambiar nada y además no es tan de monjas, la falda es solo hasta las rodillas-le dije calmandola.

-Si y las chicas del pueblo las usan mas arriba de  las rodillas, todas las usan asi, pero ya veras cuando salga de aquí, voy a vestir normal como cualquier chica de nuestra edad-me dijo sentándose en su cama y poniendo cara de soñadora.

-Si, se que lo haras pero por ahora tenemos que alistar las cosas para no retrasarnos mañana, ¿bien?-le dije, porque otra vez con lo de las chicas del pueblo, la verdad no les veia gran cosa, algunas vestian con cosas que casi enseñaban todo, yo solo me conformaria con un jean o mahon como algunas le decian, ya que aquí ni un jean se puede usar.

-Bien, como tu digas-me dijo y me abrazo.

-Melanie gracias por ser mi mejor amiga, mi hermana, mi confidente y mi encubridora, prometeme que despues de mañana, cuando salgamos de aquí seguiremos en contacto, juntas aunque no vivamos juntas-me dijo llorando y yo me puse tambien a llorar.

-Si te lo prometo, te lo juro, siempre estaremos juntas-le dije abrazandola y llorando con ella, jamás podiamos separanos, nos adorabamos, nos habiamos vuelto hermanas, eramos casi una porque cuando yo decia algo ella lo completaba y viceversa y nos hablabamos con la mirada y casi siempre sabiamos lo que pensabamos.

-Bueno, basta de cursilerias y vamos a preparar las cosas para mañana para no retrasarno-me dijo haciendose la fuerte, ella era asi nunca le gustaba verse debil, siempre trataba de ser fuerte, igual que yo, hasta en eso nos pareciamos solo que yo aveses era mas que ella, nunca dejabamos ver signo de debilidad para que nada nos hiciera daño, como que nada de lo que dijeran nos importaba pero aveses no era asi pero teniamos que ser asi porque si no las otras, las que ella llamaba envidiosas, nos hubieran comido vivas pero ahora nos respetaban, siempre hablaban pero no se metian con nosotras, siempre era por la espalda, pero siempre sabiamos cuando hablaban de nosotras, era un intento en vano de hablar a nuestas espaldas.

-Bien, vamos-le dije secandome las lagrimas.

-Casi me pongo a llorar con ustedes-irrumpio en mi cabeza esa hermosa voz que tanto amaba, la de Yasir, yo di un respingo pues no me lo esperaba, mucho menos estando Valerie aquí.

-¿Pasa algo Mel?-pregunto Valerie, ya que me habia puesto blanca como un papel y nerviosa.

-No Vale, ¿por qué?-le dije nerviosa.

-No se, te pusistes nerviosa de repente-dijo mirandome, estudiandome.

-Vaya que si es observadora y te conoce bastante bien-dijo Yasir en mi cabeza y yo en mi fuero interno mandandolo a callar porque cada vez que hablaba me ponia mas nerviosa.

-Si-le dije a los dos-pero es por la graduacion, solo eso-le dije a Valerie.

-Ah, si, pues no deberias porque desde mañana seremos libres, deberias estar feliz-dijo.

-Pues si lo estoy pero no se como es el mundo y me da un poco de miedo, sobre todo porque yo no tengo a nadie alla fuera esperandome y tu si la tienes-le dije.

-Eso si pero como si mi familia fuera gran cosa, mira donde me metieron, pero volviendo a ti, me tendrás a mi y saldremos juntas adelante-me dijo y me abrazo.

-Gacias amiga-le dije de corazon.

-No tienes nada que agradecer, lo hago porque eres como mi hermana y te adoro-me dijo.

-Y yo estaré a tu lado siempre, te guiare en todo, ya veras que saldremos adelante mi angel-dijo Yasir.

-Gracias de verdad-les dije a los dos con todo mi amor.

-De nada hermanita-dijo Valerie.

-De nada amor, por eso soy tu angel guardian-me dijo Yasir sonriendo y yo me sonroje pero aun asi le sonrei.

Despues de eso Valerie y yo preparamos la ropa, zapatos y sacamos todo lo que ibamos a usar mañana y que peinado nos ibamos a hacer mientras Yasir nos observaba y aveses se reia de las ocurrencias de mi amiga, luego nos fuimos a dormir.
Ya Valerie estaba dormida profundamente.

-¿Puedo entrar a tu cama?-me pregunto Yasir.

-Ehh, si, ven-le dije y vino y se acosto a mi lado y estiro un brazo para rodearme con el y me jalo hacia su pecho.

-Que duermas bien amor y sueñes con los angeles-dijo y se rio por lo ultimo que dijo.

-Si espero soñar con angeles-le dije en forma provocadora y burlona.

-Pues espero que sea conmigo, es con el unico angel que tienes permitido soñar-me dijo.


-Oh, no sabia-le dije riendo-pero seguro que si sueño con un angel sera contigo.

-Bien, me alegra-dijo-ahora duerme, mañana te espera un gran dia y el nuevo comienzo de tu vida.

-Si gracias-le dije y le di un suave beso.

-Gracias, te amo-me dijo con voz dulce.

-Yo tambien te amo-le dije y mis ojos se cerraron.

El sol  que entraba por la ventana me desperto, el cielo se veia tranquilo y la mañana trajo consigo tranquilidad, paz y confianza.
Mire hacia el reloj para ver que hora era, eran las seis de la mañana pero algo me distrajo, era un papel.

Lo abri:

                                 Sueño de Amor

      Yo he soñado contigo en otro mundo, yo he vivido contigo en otra vida
      y vuelo de tu alma estremecida lo he contemplado asi, meditabundo.
     De donde viene este fervor profundo, a donde va mi adoración sentida,
    Sino del mismo fondo de tu misma vida y hacia las cumbres de tu propio
    mundo.
   Yo he esperado sin prisa tu llegada; con secreta esperanza te he buscado
  y ahora que mi sueño te ha encontrado un sueño me parece tu mirada.
           Ah el misterio de hallarme en tu morada, con todo el corazon                  
           transfigurado.

                                                             Con amor:
                                                                               Yasir.

-Que hermoso-susurre.

-¿Qué es hermoso?-pregunto Valerie de pie cerca de mi cama, no me habia dado cuenta de que se habia despertado.

-No, nada-le dije como quien no quiere la cosa.

-Dejame ver ese papel-me dijo.

-No, no es nada-le dije pero me lo quito.

-¿Quién te escribio esto tan bonito?-me pregunto asombrada.

-Yo fui-le menti.

-Esta no es tu letra Melanie-dijo exasperada.

-Pues no, la verdad, la verdad es que se lo cogi a una de las hermanas-le volvi a mentir.

-¿En serio?-me pregunto asombrada.

-Si, por eso te menti y no te lo dije porque pues, hize algo malo-le dije mintiendo pero esta vez si me estaba creyendo.

-Pero no lo digo por eso porque yo he hecho cosas peores, es el hecho de que una monja escriba estas cosas-me dijo, si cierto, ella habia hecho cosas que estaban mal pero no como las que yo estaba haciendo.

-Pero olvidemos esto y bajemos a desayunar para luego prepararnos-le dije.

-Si, por Dios estoy  nerviosa, hoy nos graduamos por fin Mel-dijo brincando de la felicidad.

-Si, ya por fin-dije-vamos.
Y bajamos a desayunar, todas estaban nerviosas, con prisa y hablando y hablando sin cesar de cómo se iban a peinar, que iban a hacer luego de la graduacion, a donde irian ect, ect.

Cuando terminamos de desayunar, primero que todas, aprobechamos que los baños estaban solos y nos metimos, luego fuimos al cuarto y nos empezamos a poner el uniforme que era falda plizada negra hasta las rodillas,  medias blancas a mitad de piernas, zapatos en forma de tacos pero cerrados color negro, un blazer negro con el logo del instituto de señoritas, la camisa blanca de manga larga y la corbata color negra, ese es nuestro uniforme formal, de ocasiones especiales, que en realidad no eran muchas, asi que estaba completamente nuevo.

-Dejame peinarte-le dije a Valerie.

-Ahí si! Gracias-me dijo y me puse a arreglarle el pelo, Valerie tenia el pelo rubio miel, casi castaño, super lasio entonces lo que le hize fue darle un poco de vida, le di vuelta, le hize unos risos suaves que le caian por su espalda, ya que ella tenia el pelo hasta la cintura y la maquille delicadamente, se veia muy bonita.

-Wow, que hermosa quede, gracias Mel!!-dijo emocionada y me abrazo.

-De nada Vale, si te ves muy hermosa-le dije.

-Ahora me toca a mi, dejame arreglarte-dijo y me sento de espalda al espejo, yo tengo el pelo negro como la noche con un poco de vuelta en las puntas y pollina. Valerie siempre soñaba con ser modelo y tener muchos admiradores, que ibamos a tener muchos admiradores y éxito con los chicos, que eramos muy hermosas, yo no creía que tanto, solo somos bonitas, ella si es muy bonita y muy segura de si misma creo que eso es lo que te hace bonita la seguridad que tengas de ti misma y tu personalidad creo que tambien cuenta muchisimo, para mi lo mas importante es lo que tenemos por dentro no lo que esta por fuera, pero Valerie siempre decia que lo de afuera es muy importante y debo admitir que ella es muy vanidosa para haber crecido en un internado de un colegio de monjas, ella decia que por todo eso hablaban de nosotras a nuestras espaldas, es cierto muchas no nos soportaban incluso una vez nos habian llamado brujas pero dudo que sea por eso, ósea fuimos criadas en un lugar donde eso no importa, donde solo importa lo interior y nuestras almas.

Lucia siempre decia cosas malas sobre nosotras, la verdad no sabia que queria conseguir con eso, talvez que no tubieramos mas amigas pero nosotras dos nos bastabamos para estar bien, incluso un dia me dijo que yo era una brija que habia hechizado a todos y que utilizaba sus poderes para ser mejor que las demas porque ni que era bonita, muy inteligente y que todos me querian y me permitian todo, refiriéndose a las monjas y al padre, lo cual no es cierto, a ella la habian castigado varias veces porque siempre estaba faltando el respeto a todas y se creia mejor que nadie.
Para  mi todas tenian una piel muy bonita con color lo que yo no tenia ya que mi piel es palida pero no es que sea albina sino que soy bastante blanca y aveses lo unico que ilumina mi piel es mis sonrojos que ahora últimamente los tengo muy a menudo gracias a Yasir. Lucia es blanca pero con color, tiene el pelo marron claro y riso, los ojos café claros, en realidad es muy bonita pero su forma de ser la daña por completo, En cambio Valerie es de un blanco crema, su pelo rubio miel, lasio hasta la cintura y con los ojos azules y yo soy blanca un poco palida, mi pelo negro hasta la cintura y la pollina y los ojos verdes y una de las cosas que me gustaba era que mis ojos tienen muchas pestañas negras y largas, pero como ya dije lo fisico no es nada importante, para mi todo el mundo es bello ya que fuimos hechos por Dios, entonces somos casi perfectos y hermosos, lo unico que nos hace ser una persona fea son nuestras acciones, nuestros sentimientos y nuestro corazon.

-Listo! Ahora mirate-me ordeno Valerie sacandome de mis pensamientos, cuando me mire al espejo quede asombrada, Valerie me habia peinado con el pelo lasio y en algunos mechones de pelo de encima me habia hecho rizos y en las puntas me habia hecho vuelta para arriba, me habia maquillado con sombra blanca, un poco de rubol y un labial suave color rosa natural, en realidad casi no se veia el maquillaje pero aun asi se veia muy bonito igual que el de ella y gracias a Dios que no se le fue la mano porque sino las monjas nos mandarian a lavar la cara y nos regañarian.

-Gracias Valerie-le dije asombrada, me encanto como me habia arreglado pero aun asi de forma natural como a mi me gustaba.

-De nada, casi pareces un angel-dijo riendo y yo me puse roja de la vergüenza por el significado de la palabra angel.

-De hecho si pareces un angel-dijo Yasir apareciendo de repente a mi lado y por supuesto hablandome en mi cabeza y yo me ruborize por sus palabras y al mismo tiempo senti gusto ante sus palabras, me alegraba la idea de que le gustara como me veia, ahora le agradecia mas a Valerie por como me habia arreglado.

-Muchas gracias-les respondi a ambos y los dos me sonrieron, Yasir con un brillo especial a los ojos y yo senti muchas cosas especiales dentro de mi, lo amaba, de verdad lo amaba con todo mi corazon y mi alma.

-Bueno ya que estamos, vamos bajando, todas se van a morir al vernos sobre todo Lucia-dijo Valerie, aveses me molestaba Valerie porque aveses era muy vanidosa y yo odiaba eso.

-Si claro-dije riendome y con un poco de ironia en la voz, Valerie siempre lo decia pero yo no le creia aunque aveses me daba la impresión cuando nos miraba que Valerie si tenia razon.

Bajamos y ya estaban casi todas pero estaban arreglandose aquí, todavía no estaban listas, cuando bajamos nos voltearon a ver, unas sonrieron pero Lucia estaba que echaba chispas pero ese era su problema no es de nosotras.

-Bueno niñas nos vamos, ustedes van a tener que terminar en el camino, ya que no pudieron levantarse un poco mas temprano para poder estar lista a la hora adecuado-les dijo y Lucia iba a protestar pero la hermana Soledad la callo-silencio, no quiero explicaciones y ustedes niñas se ven hermosas-dijo volteandose a nosotras dos y a otras cuatro chicas, que eran muy dulces.

Al decir esto nos hicieron hacer una fila y fuimos hacia un autobús muy bonito, al subir Valerie me jalo a la ultimo asiento de la ultima fila y nos sentamos juntas por supuesto, eramos inseparables, siempre lo habiamos sido y sobre todo en este dia que era muy especial porque a partir de hoy nos valeriamos por nosotras mismas, seriamos oficialmente independientes y educadas, a partir de hoy seriamos libres, sobre todo yo que nunca habia salido del internado solo a la iglesia del pueblo y muy pocas a pasear por el, en cambio Valerie y unas cuantas mas salian algunos fines de semana que sus papas las buscaban, los papas de Valerie querian llevarme a mi tambien pero no podian porque yo no tenia permiso para salir incluso el amigo de mi padre, su abogado tambien lo intentaba pero por ley los unicos que podian sacarme eran mis tios y hace años que no sabia nada de ellos, solo les importaba mi dinero, ni siquiera pagaban mi la mensualidad del internado, todo lo hacia Miguel que es mi padrino, el mejor amigo y abogado de mi padre, posiblemente iria a su casa y luego me independenciaria, cuando ya supiera mas de la vida y como funciona ect.

-Niñas ya llegamos, quiero que bajen en fila, con calma y educación-dijo la madre superiora.
Dicho esto todas nos levantamos en fila y salimos del autobús.

-Muy bien señoritas, ahora ponganse la toga-dijo una de las hermanas y todas empezamos a ponernos la toga y ayudarnos en ponerlas bien, la toga era negra y azul cielo, iba a hacer negra con blanca ya que el blanco representa pureza pero a ultima hora la cambiaron a azul cielo porque es el color del Reino de Dios.

-Ay Melanie, mira quien esta ahí-dijo Valerie señalando a un muchacho, que por cierto era su novio, Adrian. Lo salude con la mano y le sonrei a escondidas de las monjas y las demas, además no lo conocia mucho solo lo que me contaba y me decia Valerie y las dos veces que había ido al pueblo y le cubría la espalda a Valerie para que se viera con el pero me caia bastante bien, se veia y era un buen muchacho y sobre todo se veia que amaba a Valerie y eso hacia que yo lo quisiera aunque no lo conociera muy bien.

-Que bello, lo amo, vino a verme en este dia tan especial para mi, lo amo-dijo Valerie emocionada.

-Si, eso es algo muy bonito pero baja un poco la voz si no quieres que te escuchen-le dije inclinando la cabeza hacia las demas y las monjas.

-Si tienes razon, que estupida soy pero es que me emocione mucho-me dijo.

-Si lo se-le dije sonriendole, de repente senti un aire a mi alrededor como si me abrazaran.

-Pero ella no es la unica que tiene a su amor en este dia tan especial, tu tambien lo tienes-me dijo la voz que mas amaba en este mundo, la de Yasir, ahora caia en cuenta el porque el aire porque el estaba asi como un fantasma para que nadie lo pudiera ver, yo me sonroje y me puse a temblar.

-En un momento regreso Valerie-dije y fui atrás del centro de la iglesia sin ni siquiera ver que respondia pero no me importaba, ya le inventaria algo luego.

-Estas aquí!-dije emocionada y salte dentro de sus brazos.

-Claro que si amor, ¿crees que me perderia el primero de tus mejores momentos que vas a pasar en la vida?-me pregunto mirandome a los ojos y alzando una ceja.

-No pero igual me alegra y me emociona verte aquí conmigo hoy-le dije acariciando una de sus mejillas.

-Lo se y solo quiero decirte que estoy muy orgulloso de ti, que voy a estar a tu lado celebrando junto a ti y tus padres tambien estan muy orgullosos de ti-dijo acariciando mi cabello.

-¿Mis padres?, ¿puedes verlos Yasir?-le pregunte y rapidamente me di cuenta que se le habia salido porque el no tenia intencion de decirme eso.

-Se supone que yo no te dijera eso, estubo mal, mejor olvidalo-me dijo ansioso.

-No, no lo voy a olvidar, explicame-le dije un poco alterada.

-Luego, ahora debes volver, ya te estan buscando y preguntando por ti-me dijo.

-Esta bien, luego-le dije( no lo olvidaria)-Bueno me voy, ¿prometes que estaras ahí todo el tiempo?-le pregunte.

-Claro que si mi niña, estare a tu lado, como siempre-me dijo sonriendo y yo le devolvi la sonrisa.

-Bueno, hasta luego-le dije y le di un tierno beso.

-Te amo-me dijo.

-Y yo tambien-le dije, sonrei y me fui, seguro ahora se pondria como fantasma para estar conmigo en mi graduacion.

El tenia razon, las monjas ya me estaban buscando.

-¿Dónde estabas Melanie?-me pregunto la madre superiora enojada, era la primera vez que se enojaba conmigo.

-Ehh, quise estar un momento a solas para asumir todo esto, calmar mis nervios y agradecer a Dios por llegar hasta aquí-le dije, no era de todo mentira pero no podia decirle “fui con mi novio, que por cierto es mi angel guardian”, no podia, creo que me matarian pero bueno no era el momento para pensar en eso.

-Oh que bien Melanie, eso esta muy bien y perdon por enojarme contigo cielo-me dijo pasando la mano por mi cabello.

-No se preocupe madre, no pasa nada, fui yo quien se fue sin permiso-le dije.

En eso veia a las demas mirandome mal y a Valerie viniendo hacia mi y en la cara tenia algo como diciendo “ni creas que yo me creere todo eso, y me vas a decir la verdad”, luego hablaria con ella, no le diria la verdad por supuesto pero cuando ella llego hasta mi, la madre superiora nos pidio que fueramos entrando, esto me recordaba un poco al dia de nuestra primera comunión solo que ese dia estaba casi todo el pueblo, ya que tambien habia otros niños para hacer lo mismo y tambien habian venido por nosotras.

En ese momento se habian reunido bastante gente del pueblo y nos aplaudian y nos miraban con amor como diciendo “seran nuestras proximas monjas y alguna de ellas nuestra madre superiora” se equivocaban con la mayoria, solo con Ana, Magdalena y Azucena talves si acertaran.

Luego de sonreirles, entramos al centro, nos esperaba el padre al lado de las monjas.

-Bien señoritas, tomen asiento-dijo la madre superiora.

-Antes de comenzar la ceremonia, debo decirle niñas, señoritas mejor dicho, que estoy muy orgulloso de ustedes-dijo el padre.

-Gracias padre-dijimos todas.

-Que Dios me las bendiga siempre y las sepa guiar por el camino del bien-dijo el padre.

Dicho esto empeso la ceremonia, entrega de trofeos, medallas, Valerie y yo nos llevamos unos cuantos y por ultimo la entrega de los diplomas, fueron llamandonos de una en una por apellido y al fin llego mi turno.

-Señorita Del Valle-dijo la madre superiora, me levante y fui a recogerlo.
El abogado de mi familia, el mejor amigo de mi papa, que es mi padrino se levanto a aplaudirme y tomarme fotografias, eso fue una sorpresa para mi ya que no esperaba verlo aquí y tambien para mi sorpresa los padres de Valerie se levantaron y tambien me tomaron fotografias y me sorprendio y aun no era el turno de Valerie.

-Felicidades mi niña-me dijo la madre superiora.

-Gracias madre-le dije y nos dimos un abrazo.

Cuando baje me esperaban mi padrino y los padres de Valerie.

-Felicidades mi niña, estoy muy orgulloso de ti y seguro tus papas lo estarian tambien-me dijo mi padrino abrazandome.

-Gracias padrino-le dije abrazandolo fuerte.

-Felicidades Melanie, cariño-dijo la señora Sofia, la madre de Valerie y me abrazo.

-Gracias señora Sofia, señor Alejandro-les dije sonriendoles.

-No tienes nada que agradeser linda, eres la mejor amiga de nuestra hija, eres como su hermana y por ende eres como nuestra hija-dijo el señor Alejandro.

-Gracias de verdad, gracias-les dije a los tres y fui a tomar aciento.

Despues de mi siguieron llamando y por fin llamaron a Valerie.

-Señorita Isaguirre-dijo la madre superiora, Valerie se levanto y tomo su diploma, agradecio y fue a donde sus papas que estaban muy felices y tomandole fotos y Valeri posando ya que le encantaba modelar, suguro cuando saliera de aquí se dedicaria a eso y podia serlo ya que era muy bonita y muy fotogenica y le encantaba las fotos y toda la ropa.

Luego de eso hubo una comida, Valerie y sus papas me suplicaron que fuera con ellos a su mesa porque yo era parte de su familia y mi padrino y yo aceptamos, estabamos muy felices, eramos como una familia, la familia que desde que mis padres murieron quise tener y además cuando yo era pequeña siempre le pedi una hermana a mis papas pero ellos no la habian tenido y pues luego paso el acidente.
Cuando terminamos, las monjas nos pidieron que ya nos despidieramos, que ya era hora de irnos, ya que eran las siete de la noche y que no nos pusieramos tristes ya que mañana dejabamos el internado y iriamos a casa, y yo no tenia casa propia, no tenia unos papas esperandome pero ahora tenia gente que me querian como Valerie, sus papas y mi padrino y ahí es donde me iba a vivir en casa de mi padrino a lo que yo me decidia a independisarme.

Al llegar al internado, despues de varias palabras y felicitaciones nos fuimos a nuestros dormitorios.

-Bueno ni modo que te pida que te vengas a vivir con nosotros ¿verdad?-me dijo Valerie triste.

-Lo siento Valerie pero voy a estar mejor con mi padrino y luego me independisare, cuando reciba mi herencia y sepa como manejar todo-le dije.

-Bueno pero por lo menos ve a visitarme a diario-me pidio.

-Esta bien te vsitare y tu tambien visitame a mi porque no voy a estar todos los dias en tu casa-le dije sonriendole.

-Ahí esta bien, esta bien como quieras, despues que no nos distanciemos, todo esta bien-dijo sonriendo.

-Bien, ves todo esta saliendo muy bien amor-dijo Yasir en mi cabeza.

-Melanie, ire a ducharme, ¿no hay nadie cierto?-me pregunto ya que yo acababa de venir de ducharme.

-No, esta solo-le dije y ella asintio y se fue.

-Gracias por haber estado conmigo toda la mañana y la tarde-le dije sonriendole.

-No tienes nada que agradecer, para mi fue un placer haber estado contigo-dijo sonriendome y acaricio mi mejilla.

Despues de estar hablando unos minutos, se despidio porque además de que ya venia Valerie, tenia unas cosas que hacer, estoy segura que en el cielo y de vez para que yo no le volviera a preguntar lo de mis padres pero se equivocaba si creia que yo lo iba a dejar pasar.

Valerie llego, nos abrazamos y nos acostamos a dormir, ya que estabamos muertas, habian sido demasiadas emociones en un solo dia y estabamos agotadas tanto fisica como mentalmente.

Ya tenia claro a donde iria mañana pero no sabia nada mas y tenia miedo pero estaba segura que Yasir estaria a mi lado en todo momento y eso me tranquilizaba y me daba paz.